jueves, 7 de junio de 2012

¿Qué pasa con España?

Creo que llegó el momento de hacernos mayores. No biológicamente, eso ya pasa aunque no queramos, sino como país. Si es que llegamos a tiempo.
Llevamos seis meses de malas noticias. Parece que desde que entró el nuevo gobierno, se ha desatado una tormenta alrededor nuestro. Y hay quién desearía, incluso, que volviesen
los de antes. Al fin y al cabo, la prima de riesgo era menos elevada hace un año.
Yo vivo estos tiempos tan difíciles con cierta esperanza. Como el que está recibiendo una terapia de choque que lo deja al borde de la muerte, pero es su única esperanza para salvarse.
Estos meses hemos vivido un curioso hecho, que es infrecuente en nuestro país: estamos reconociendo la gravedad de nuestro problema. Bankia no es un agujero que se ha creado en los últimos meses. Lleva cuatro años, quizá más, formándose bajo las cuentas tramposas de CajaMadrid y Bancaja. Pero se tapó, se escondió y se inventaron miles de palabras biensonantes con el único fin de hacernos mirar para otra parte. Ahora ha salido un tipo de apellido impronunciable (Goirigolzarri) que ha dicho que o se sueltan más de veinte mil kilos, o Bankia se hunde. La realidad es la misma que el mes pasado. Porque el mes pasado Bankia también necesitaba veintitres mil millones. Ahora alguien lo ha dicho. 

Tenemos una Educación y una Sanidad que no podemos pagar. Eso es un hecho incontestable a la vista de los números. Pero si nadie lo dice, y se financian emitiendo deuda, el problema no existe. De vez en cuando sale el ministro/secretario/presidente de turno diciendo que las cuentas van inmejorablemente, y el problema desaparece por arte de magia.  Pues no, no desaparece. Se necesita el copago, el recorte y el control exhaustivo de los gastos ya. No en un futuro próximo, ni dentro de unos meses, no. Ya . Porque no hay dinero, y el que nos dejan con cuentagotas, y pidiendo favores, se hace a unos intereses de ruina. Este problema existía hace uno, dos y cuatro años.  Solo que no se hablaba de él. Llevamos varios años haciendo presupuestos que , incluso con trampas, tienen más del 5% de déficit estructural, o sea, que no es por algo puntual de un año. Son gastos que se repiten un año tras otro.  Una vez más, lo que ahora cambia es que se está admitiendo que así no se puede seguir. Por pura necesidad,  claro, que político y valiente son palabras contrarias en nuestro país.

Podemos seguir con muchas otras cosas que están saliendo estos meses en tromba, pero la esencia es la misma. Los problemas estaban,  solo que ahora se han quitado los paños calientes, porque ya no tenemos más,  y estamos  asustados.   ¿Cómo no estarlo? Si nos decían que todo iba bien, que la crisis no existía, que estábamos en Champions, y que las ayudas y subsidios estatales debían crecer año tras año, como símbolo inequívoco de progreso.  ¿no éramos merecedores de todos los derechos del mundo, a cambio de no se sabía muy bien qué obligaciones? ¿no tenía todo español derecho a trabajar 35 horas o menos? ¿Acaso íbamos a trabajar  las mismas horas que nuestros padres? Entonces, ¿para qué tanto progreso y tanta leche?

Hay muchas voces desde todos los rincones de este país a las que se les nota cierto deseo de que seamos intervenidos. Lo ven como la solución a unos problemas que nosotros somos incapaces de solventar sin ayuda. Lo comprendo, pero no veo en esto sino un fracaso como país que constata que somos incapaces de  dirigir nuestros destinos como una nación desarrollada.

Y esos deseos me recuerdan aquello que oí a algunos viejos : "Con Franco vivíamos mejor" .   Ahora diremos " Con Merkel, viviremos mejor".  En el fondo no habrá tanta diferencia.

lunes, 28 de mayo de 2012

¿A quién culpo de mi hipoteca impagable?


Lo que voy a comentar ha venido a raíz de una discusión que tuvimos mi hermano y yo, sobre el caso de unos amigos que pidieron un préstamo por un valor elevado, y ahora tienen serios problemas para pagarlo, aparte de que el piso que compraron con ese préstamo vale menos que la deuda que les queda por pagar. Caso bastante normal, desgraciadamente, en los tiempos actuales. Y la discusión vino por dilucidar quién era el culpable de haber llegado a esta situación. Mi hermano era partidario de repartir la culpa entre el banco y sus amigos. Uno por dar un préstamo que no era aconsejable, y los otros por meterse en una empresa demasiado arriesgada. Yo, por supuesto, discrepaba, diciendo que mi hermano, al igual que muchos otros, mezclan problemas distintos, y pecan de no tener ciertas ideas tan claras como debieran.

Me explico.

Aquí confundimos dos temas diferentes: por un lado la mala gestión de los bancos, que les ha llevado a la situación actual. Se ha hablado mucho de esto, y de si somos los contribuyentes los que debemos ir en su rescate si las cosas les van mal, aunque cuando han ganado dinero no lo han repartido entre nosotros. Y sobre el famoso riesgo sistémico, aquel que dice que si dejamos caer un banco todas las plagas de Egipto caerán sobre nosotros, habría que pensar hasta qué punto es cierto, y de serlo, si después de las ayudas generosamente enviadas, se ha hecho algo para eliminarlo, o dentro de diez años tendremos el mismo riesgo, con equivalente obligación de ir en ayuda de los banqueros. Todo esto está muy bien, pero es un problema completamente diferente del que apremia a los amigos de mi hermano. Por tanto, la responsabilidad de su situación puede que no reacaiga en estas entidades.

Veamos este problema. Unos particulares acuden a un banco a solicitar un préstamo. Tienen unos determinados ingresos con los que piensan afrontar los pagos. Nadie les obliga a pedir esa cantidad, ni a comprar ese inmueble. Existen seguramente viviendas más económicas que la que han elegido, y en último caso, existe el alquiler. Pero por los motivos que sean, y que ellos han valorado, deciden comprar esa casa a ese precio. Resulta que a la vista de los acontecimientos, fue una decisión imprudente y arriesgada. Y ahora hay una opinión muy extendida de que el banco “no debió darles el préstamo”. O sea, que el banco tenía que actuar de padre responsable de estos chicos, y velar por su bienestar futuro. Aquí algo chirría. ¿De verdad que se puede exigir a un negocio que vele por los intereses de sus clientes, por encima de los suyos? Entonces a una persona que va a comprar una televisión, por ejemplo, el dependiente de la tienda debería indicarle el lugar donde ese mismo aparato está más barato, si es que existe, o en un bar no deberían servir un segundo whisky a nadie, porque seguramente le producirá malestar al día siguiente. Así podríamos seguir con ejemplos igual de absurdos en todos los comercios que se nos ocurran. Si son ridículos , ¿por qué a los bancos se pide que actúen de esa manera?. Mi opinión es que la responsabilidad de esa decisión, y de la situación en la que se encuentran es completamente de los chicos que abrieron la hipoteca, y que actuaron libremente, exponiéndose a las posibles consecuencias, tanto positivas como negativas.

Y aquí llega la idea que estimo no está suficientemente clara para mucha gente. No creo que a nadie que le preguntes te diga que la libertad es mala. O que quiere menos libertad. El concepto de libertad se tiene como algo intrínsecamente bueno, pero lo que todo el mundo no asume es que la libertad lleva consigo una carga equivalente de responsabilidad. Es imposible ser libre para tomar tus decisiones, y al mismo tiempo, si éstas decisiones salen mal, tener a alguien que cargue con las consecuencias. Eso es sencillamente absurdo. O se es libre, o se pierde una parte , o toda la libertad a cambio de no asumir la responsabilidad que acarrea.

Y la falta de claridad sobre este tema es la que hace que muchas personas pidan que se paren los embargos de sus casas, o que se les rebaje la cuota que suscribieron, o que , en definitiva, se les saque del lío en el que ellos solitos entraron por su pie. Y que, por supuesto, lo paguemos entre todos. Pero si, como pasó en época de burbuja, compras una casa por un valor , y la vendes un año después ganando un treinta por ciento, a nadie he oído que quisiera pagar una parte de ese beneficio a la comunidad, para tener dinero con el que salvar a otros que no tuvieron tanta suerte. Y es que en el fondo, intentan hacer lo que se está haciendo con los bancos : privatizar beneficios y socializar pérdidas.

Y la paradójica conclusión de todo esto, es que si uno no está de acuerdo en los rescates a los bancos, si es coherente, por las mismas razones tampoco lo estará con salvar de los embargos y las cuotas impagables a aquellos que tomaron malas decisiones.

Curioso, ¿no?.

sábado, 26 de mayo de 2012

Repetidores

     Antes de la irrupción de internet en nuestras vidas, los medios de comunicación eran la fuente de información y todo lo demás se quedaba en habladurías, en dimes y diretes y en simples rumores. La propagación era lenta y se truncaba con facilidad si unos pocos eslabones de la cadena rompían el boca-oído. Con internet también más de lo mismo pero a la velocidad de la luz y con la posibilidad de interactuar entre eslabones. Romper el círculo es mucho más lento y las redes sociales se encargan de mantener ecos vitam-eternam. Todo ha cambiado para seguir igual y ahora nos cuesta más que nunca separar la paja del grano sospechando que, a veces, nos será imposible hacerlo.


     La proliferación de medios y su divulgación a bajo coste gracias a la red de redes y sus poderosos instrumentos ha popularizado los medios de información creando dos canales fundamentales: el profesional de siempre y el ciudadano. El primero solo ha implementado una nueva herramienta pero el segundo surge de la nada, sin orden y sin ataduras propias que a menudo acaban en censura o indiferencia. Evidentemente, todos salimos aparentemente ganando porque la información viaja de dos formas complementarias con y sin formato, con y sin supervisión. El canal profesional puede estar diciendo, por ejemplo, que en Siria la situación se estabiliza mientras que el canal ciudadano nos muestra vídeos que reflejan la cruda y opuesta realidad sin editar. Esto es fantástico, nos abre la mente y nos recuerda que no todo lo que se nos cuenta es cierto.

     Los medios profesionales de comunicación repiten una y otra vez lo que les llega a través de sus fuentes habituales como las agencias de prensa sin intentar en muchas ocasiones contrastar la información por sí mismos o simplemente porque no hay tiempo para ello. Hay que luchar por ser el primero en dar la noticia y, con demasiada frecuencia, al margen del rigor que pasa a un segundo plano. Por si fuera poco, algunos medios, posiblemente de menor entidad (que no repercusión), repiten lo que dicen otros medios sin comprobar nada, únicamente para no "perderse" la noticia o bien porque simplemente había que decirlo como los demás.

     Posteriormente, los ciudadanos que no suelen tener ni el tiempo ni la capacidad para contrastar nada de nada redifunden la mayor parte de la información que les motiva, con suerte con una mínima criba y que, a su vez, han recibido de los medios oficiales introduciendo leves o manifiestos retoques personales que "enriquecen" distorsionando lo que probablemente ya ha sido enriquecido y distorsionado durante el camino. En realidad nos volvemos parte del engranaje, parte del sistema sin ser conscientes de ello.

     Por fin, cuando la información llega al usuario/consumidor final, éste dar por hecho que todo lo que dicen "todos" parece más cierto que lo que solo dicen unos pocos. Además cuanto más se repite algo, menos se cuestiona. Cuando uno se para a pensarlo con algo de perspectiva el castillo de naipes se desmorona rápidamente pero en el día a día se da por asumido que tanta gente no puede estar equivocada. Y así nacen los mitos, las leyendas, los derrumbes bursátiles, los golpes de Estado, la riqueza y la miseria. ¡Qué vulnerables y manipuladores somos!

     Todos nos hemos vuelto repetidores. Repetimos números, repetimos datos, repetimos hechos y acontecimientos, repetimos rumores, repetimos deseos, repetimos miedos, repetimos euforias, repetimos cualquier cosa. ¿No deberíamos preguntarnos quién está en la cúspide de la pirámide manejando la información en su nivel primario? ¿A quién benficia todo esto y a quién perjudica? La teoría de la conspiración es una tontería pero este planteamiento es legítimo.

     Cuando el rey de las comunicaciones era el correo electrónico todos recibíamos mensajes de cadenas de reenvío que algunos no se atrevían a romper. Actualmente las redes sociales han creado su propio lenguaje, su particular modus operandi de entre los cuales destaca Twitter por haber "inventado" el retweet, o sea el repetidor electrónico por excelencia. Se lee, se acepta y se reenvía, normalmente en escasos segundos o minutos. Sencillo, rápido, gratuito y nada comprometedor puesto que lo ha dicho otro. La información viaja y viaja y se repite y se repite y se repite y se hace cierta y más cierta y muy cierta y finalmente ya nadie la cuestiona.

     Los seres humanos somos tribales por definición pero deberíamos todos hacer un esfuerzo de sinceridad con nosotros mismos. Recordemos que, aún queriendo ser parte de la manada porque eso nos hace sentir más fuertes, debemos esforzarnos por tener ideas propias y contrastarlas con la información que nos impacta.

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miércoles, 23 de mayo de 2012

Por arte de magia.

     La prestidigitación consiste fundamentalmente en atraer la atención sobre la mano derecha mientras la izquierda hace el trabajo "sucio".

     Cuatro años y medio de crisis después, y, transcurridas mil y una cumbres, "solo" se ha conseguido que no reviente todo; ahí queda la hazaña. Jesús Huerta de Soto, parafraseando a Marx, dijo que "el opio del pueblo es la expansión crediticia". La solución final acabará siendo una salida mediante inflación o sea dándole un nuevo chute al drogadicto y consiguiendo que las deudas reales no sean pagadas. Es antidemocrático, perverso, nos hace a todos más pobres y le manda un mensaje contaminado a los jóvenes que borrarán la palabra esfuerzo de su vocabulario. Algunos no lo entienden, muchos lo ven bien y otros lo consideran inevitable. El caso es que un problema tan serio debería ser afrontado saneando sus cimientos o al menos eso indica el sentido común. Si lo parcheamos al final el problema acabará reproduciéndose y costará más caro. La inflación solo le pega una patada al problema y nos lo volveremos a encontrar más adelante en el camino; nosotros mismos, nuestros hijos o los hijos de nuestros hijos.

     Mientras tanto se sigue hablando sobretodo de fútbol (un extraño sinónimo en España de deporte), de toros (como fiesta o como arte, poco importa) y los reality-shows siguen triunfando en prime time. La mano derecha es muy efectiva y la utilizan tanto regímenes totalitaristas como democráticos: ¿las dos caras de una misma moneda? Algunos telediarios incluso dedican más tiempo al fútbol que a todo lo demás y nadie parece escandalizarse sabiendo que, con cinco millones de parados, unos señores en el mundo de yuppi, completamente ajenos a la realidad, ganan millones por pegarle patadas a un balón. Es más, los campos de fútbol aparecen abarrotados de gente. Entradas a 400 euros y algunas a 6.000 euros. Ver para creer. ¿Hay crisis o todos los espectadores son millonarios o algunos no dan de comer a sus familias para ir al fútbol? Sí, claro, todo el mundo puede divertirse como quiera pero ¿a cualquier precio? ¿a base de más endeudamiento? ¿Tanto se parecen el ladrillo y el fútbol que ciegan la vista? Y mientras un cirujano es criticado por ganar unos miles de euros anuales salvando vidas. Odiosas comparaciones.

     John Lennon nos recuerda que "la vida es aquello que va sucediendo mientras haces otros planes". Sencillo de entender, difícil de recordar. Ayer, en el último tramo horario, Wall Street se puso muy nervioso por el mero rumor de que Grecia estuviera preparando un borrador de salida de la eurozona.

     ¡Que siga la magia!

sábado, 19 de mayo de 2012

El día que gobierne Sýriza en Grecia.

Grecia-Sýriza
     Alexis Tsipras, el líder de la segunda formación más votada en Grecia, Sýriza, una coalición de la izquierda radical, acabará probablemente gobernando el país si evidentemente sale elegido el próximo 17 de junio.

     Hasta ahí todo correcto pero es que Tsipras tiene un discurso complejo porque quiere permanecer en el euro pero sin aceptar los términos del rescate. Dentro y fuera a la vez es una utopía. Su argumento principal es que una cadena es tan sólida como su eslabón más débil en clara alusión a los países periféricos, Grecia a la cabeza ¡y tiene razón! Sin embargo es una partida de póker que no puede ganar porque es una amenaza a toda la eurozona y, cuando la gangrena sube, se acaba cortando el miembro infectado.

     Es difícil prever cómo acabará la relación, si como un matrimonio de conveniencia en el que ambas partes ceden parte de su terreno para poder seguir juntos, o, en divorcio con todas las consecuencias. En tales condiciones, si Tsipras mantiene sus criterios hasta el final, acabará sacando a Grecia del euro y de la UE por petición propia porque, recordemos, que no hay ningún mecanismo que permita la expulsión.

     Los partidos políticos griegos, en un alarde de irresponsabilidad colectiva, no parecen haber mirado por su país ni por el interés de sus ciudadanos, solo parece importarles el poder. Pactar una coalición hubiera sido lo más razonable y probablemente lo más justo para todos pero, intentar convocar un referéndum sobre el euro disfrazándolo de elecciones, no.

     Permanezca Grecia en la eurozona o se salga de la UE ya no se considera en Europa un tema tabú y eso es lo que debería asustar a los griegos. El simple hecho de que ya se hable de esa posibilidad debería hacer reflexionar a los electores que son, en definitiva, quienes tienen la decisión en su mano dentro de unos días.

     Y, por supuesto, también puede ocurrir lo inesperado y que Sýriza no salga elegida. Se abrirían otras posibilidades, otras alternativas, quizás un nuevo espejismo o una realidad.

     Grecia es el padre de la democracia y ahora sus ciudadanos tienen que ejercerla más que nunca.

martes, 15 de mayo de 2012

El día que Pandora abrió su caja.

     Pandora, la mujer creada por Zeus por venganza para introducir todos los males en la vida de los hombres, después de que Prometeo les otorgara el don del fuego, acabó abriendo su recipiente y lo esperado y temido sucedió.

     Hoy, 15 de mayo de 2012, también se abrió la caja de Pandora y el Ibex 35, tal y como muchos ya habían vaticinado, cerró por debajo del mínimo del 9 de marzo de 2009 (6.702,60) concretamente en 6.700,70 puntos. Evidentemente la prima de riesgo española echó una mano en la debacle al tocar los 489,87 puntos básicos pero a nadie se le escapa que ha sido el fracaso de las últimas negociaciones para formar gobierno en Grecia el que ha creado el caldo de cultivo adecuado para el resultado obtenido.

     Ni Grecia ni España ni Italia son creíbles, aceptémoslo. Ninguno de ellos convence a nadie y las consecuencias son las que se reflejan en los mercados. Me cansa oir hablar de la maldad de los mercados especulativos. Cualquier ciudadano debería preguntarse si le prestaría dinero, cantidad de dinero, me refiero a una cantidad ingente de dinero, a un vecino despilfarrador, en paro, sin ingresos, que debe dinero a todo el mundo y al cual le va a ser imposible devolverlo en muchos años. Hagamos un ejercicio de honestidad y sinceridad con nosotros mismos porque ayudar es solidario y de agradecer pero si esta persona no quiere o no puede cambiar porque la situación le ha sobrepasado lo más sensato será no prestarle dinero, y el interés será lo de menos por el riesgo a asumir. Podemos perdonarle parte de lo que ya le hemos prestado y que damos por perdido pero, en esas condiciones, no seguiremos ayudándole por temor a que la quiebra nos alcance también a nosotros.

     No podemos seguir tolerando ese discurso facilón en el que los gobiernos hablan de mercados tiranos y de especulación sin piedad. Todo eso es demagogia. Si nadie les presta salvo ellos por algo será. No puedes morder la mano que te da de comer y los políticos son los más consciente de ello. Están jugando a un juego muy peligroso, bailando entre dos aguas y a nadie se le escapa el riesgo que asumen los mercados al aceptar cubrir deuda con más deuda. La bolsa de nieve desciende el monte aumentando de diámetro sin cesar. Mientras la avaricia les tutele, el esquema ponzi seguirá "operativo" pero, como algún día se vuelvan más sensatos ¿quién seguirá aportando el dinero necesario?

     Siguiente nivel del Ibex 35, los 5.500 puntos de septiembre de 2002 o sea que los más osados serán tachados de insolidarios y se pondrán cortos a partir de mañana teniendo en mente una caída añadida de hasta 1.200 puntos. Sin embargo, no le quitemos mérito a aquellos que se arriesguen con esa estrategia porque las cosas podrían precipitarse a la inversa y si usted está convencido de ello invierta a la baja y no se limite después a decir que lo ocurrido era evidente. Los valientes de pensamiento son los más cobardes en cuanto tienen que cubrir sus palabras con su dinero.

     Merkel con un pie lastrado fuera y otro medio dentro ya no será tan contundente, aunque lo diga a fecha de hoy, con Hollande. Merkozy ya es historia y Merkhollande es el inicio de una nueva etapa que promete ser mucho más rentable para todos. Se acabó, teóricamente, la política de austeridad sin contrapartida y debemos confiar en que una política más equilibrada permita alcanzar a medio plazo objetivos imposibles a corto. Sí, los abusos hay que depurarlos pero de hoy para mañana sería un hara-kiri. El mundo no se acabará la próxima década. Lo importante es sentar las bases para que no se vuelvan a cometer los mismos errores y se erradiquen los abusos. Wishful thinking?

domingo, 13 de mayo de 2012

¿Podemos detectar con antelación una hipotética recesión en EEUU?

     Si damos por probable la recesión de EEUU a partir de este verano, lo más lógico es intentar detectarla tan pronto podamos, sin precipitarnos equivocadamente en una anticipación irracional y sin dejar pasar demasiado tiempo reaccionando tarde. Difícil sí, imposible, no.

Previsión realizada por JIC en mayo de 2009
    Juan Ignacio Crespo (JIC), analista independiente de gran reputación, se atreve a anticiparla en sus gráficos del DJIA y añade que, cuando el VIX toca los 15 USD, se confirma la caída de la bolsa norteamericana. Genaralmente suele convenirse que el VIX no es un indicador adelantado pero por debajo de 20 muestra sobrecompra y la reacción natural suele ser vender.

     Tal y como puede verse en el gráfico que presentó JIC ante ThomSon Reuters en mayo de 2009 anticipó una recesión para 2012-2013 y otra para 2016-2017.

Previsión actualizada por JIC en abril de 2012
      En el gráfico que presentó el mes pasado puede apreciarse que, aunque el movimiento empieza a desarrollarse en base a lo previsto, surge un tramo alcista por el momento discordante que parece alejarse de la previsión.

     El propio JIC incide en que no pretende precisión alguna sino dar una apreciación aproximada de lo que, según él, es un patrón repetitivo históricamente hablando, en este caso similar al de 1974-1982 (crisis del petróleo).

   Por nuestra cuenta podemos fijarnos en algunos indicadores que pueden mostrarse reveladores como el ISM manufacturero, la curva de tipos y el indicador más relevante de Estados Unidos.

     El ISM puede anticipar una recesión si baja de 45. A fecha de hoy se sitúa por encima de 50.


     La curva de tipos se invierte cuando baja de 0. A fecha de hoy supera 1,5.


     El US Leading Indicator señala ventas cuando baja de 0. A fecha de hoy supera 1,5.


    Que las gráficas apunten, en un momento dado, a una recesión no significa que ésta acabe dándose pero, cuando la recesión se da, las gráficas de estos indicadores lo confirmarán.

    En cualquier caso recordemos que los parámetros de recesión europeos (dos trimestres consecutivos con crecimiento negativo) no coinciden con los norteamericanos  y que quien decreta oficialmente los periodos de recesión es el "The National Bureau of Economic Research".